conociendo a julia

...Juli tocó la puerta a las 9 y veinte y yo dormía plácidamente, porque anoche me colgué hasta las cuatro. pasa que llegué del trabajo, ví el último tango y flashie mal con brando y también con maría, que a su vez es parecida a mercedes, después me acuerdo de que mi casa es un caos por t o d o lo del fin de semana y me pongo a limpiar hasta tardísimo, entre cosa va y viene cuatro de la mañana, y la julita hoy puntual con remera al croché lila y medio desabrigadita, y nos ponemos con la masilla y los canutillos y las mostacillas y las creaciones de corazones, círculos, cuadrados, lunas. ahora la juli debe andar viajando para amaycha, el mejor cielo, la más linda plaza, el mejor aire, y al rato de jugar con las manos y la masa que se transformará en collares que luego venderemos para gastar el dinero que quizá ganemos en comida que comeremos y cagaremos, al rato llega mi querida ceci, que viene de medida por medida de ver una obra, y ella se engancha y también moldea su masilla y hace un hermoso collar, y tomamos mate y escuchamos maría elena walsh y un poco hablamos otro poco nos callamos, y juli se exalta por pavadas y habla fuerte pero con una voz muy linda, y ceci agradece el momento, yo mientras pienso que quizá eso tan chico sea estar bien, ser feliz, y agradezco a la maldita tecnología de la que tanto reniego porque mediante este blog conocí a una amiga, Juli.

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Marlon Brando

tan bello que parece de otra especie

tengo sueño, ojalá esta noche sueñe que vuelo y que como shot barra en una plaza sin mosquitos mientras miro a un nene de cinco años amacarse y le sonrio y me sonrie y me acerco y le toco el pelito rubio y él le dice a su papá: esa nena me acarició la cabeza....y que se aparezca enzo y yo lo persiga para agarrarlo y abrazarlo, pero nunca poder, tengo sueño, ojalá sueñe que vuelo y de repente estoy con un frío siberiano en Moscú, mirando rusos y encontrándome con Raskolnikov que a su vez busca a su Sonia pero cuánto la detesta, por puta, tengo sueño, ojalá alguien hiciese mi tesis por mí y mil cosas más, pero a la vez es lindo, da miedo, y no sé si el miedo es deseo, qué lindo soñar con pasearse por nubes blancas y ser Mary Poppins o un hada o una sirena o la Maga, qué lindo encontrarse con Horacio en un sueño, sentir a veces ese Mundo Maga, llegar a olerlo, qué lindo sería esta noche soñar, recibir la señal que mi amiga espera hace ocho años, que desea y no se concreta porque tiene miedo, qué lindo seguir soñando, estoy en un barco, un niño al lado mío y es mi amigo y comemos torta de chocolate mientras miramos el cielo y escuchamos el viento y todo huele a submarino sin hundir.

por estos días...

me divirtieron

me cansaron

me acompañaron

me demandaron atención, tiempo, dedicación

me regalaron varias mateadas

me hicieron sentir querida

me hicieron dormir mal, pero con risa

me deleitaron con su arte

me hirieron sin querer y bastante queriendo

me dieron hermosos abrazos

me absorbieron energía

me confiaron

me mostraron su fragilidad

me dijeron que me querían, o que algo mío ayudó

fueron días intensos. quizá por eso no me aparecí por esta realidad irreal.

Verduras cocinándose.

Seminario de pedagogía: mejorar trabajo, leer que se yo qué, un parcial o algo así, un libraco que ni empecé.

Franco, guión. Crear, leer, dibujar, bocetar. Ponerse las pilas, adorar, sentir la profesión...uy, esos no deberían ser deberes.

Tesis de grado. Ecoaldea. Buscar, pensar y dejar de pensar y actuar, hacer anteproyecto, leer investigaciones, qué tesis quiero hacer, seré maldita positivista o intelectual marxista.

Trabajo. Vendo ropa. Que cosa boba.

Celular, como suenas.

Como hace la gente a tener cinco hijos, un trabajo, ir al tennis de los miércoles y a misa los domingos?

yo ni siquiera puedo con las horas cortas de mi simple vida.

Con toda mi ilusión, hace más de una hora fui por primera vez a la feria de la verdura, que queda a sólo cuatro cuadras de mi casa. Ya en el lugar, elegí arbitrariamente un puesto, y me atendió un simpático muchacho al que le compré manzanas, naranjas, mandarinas, bananas, batatas, acelga, cebollas, etc, etc, etc...y todo en cantidad. Al finalizar la compra, le pregunté ¿cuánto es?, y respondió con humor: cien pesos. Reí aunque sin muchas ganas, porque esos chistes por lo general me deprimen, y finalmente me dijo: 23,60. Le pagué a una chica tenida de colorada con tintura barata. Hasta ahí todo bien, pero cuando ví el cajón de verduras observé al mismo tiempo su enormidad. El muchacho ofreció traerlo gratuitamente a mi departamento en los próximos 15 minutos. Pero hace más de una hora que me fui de la puta feria, y las putas verduras no llegaron.
Evalúo dos chances:

-Están retrasados. Lo cual me embola soberanamente, porque tengo miles de cosas que hacer antes de las cinco, y fuera de casa.
-Me han cagado, y la verdura jamás llegará, lo cual me hace sentir muy estúpida, porque no sería la primera vez que me pasa algo así.

Hace muchos años, había frazadas de lana de oveja, de algodón, sintéticas, de llama, de alpaca. Unos las producían masivamente en grandes empresas, otros, en la tranquilidad de su hogar o a través de un telar.
Todos usábamos mantas, nos protegíamos del frío, pero cada cual desarrollaba su propia técnica, que había sido creada según las necesidades de abrigo dadas por el clima del lugar.
Algunas culturas empezaron a dominar a otras, y así impusieron su propia técnica a las dominadas, que fueron obligadas a suprimir su cultura para apropiarse de una que les era ajena.
Ese intento de deculturación por parte de los dominantes, no fue cien por ciento efectivo. Es que los salvajes resistieron...Y en las noches los negros esclavos les cantaban a sus ancestros a través de extrañas danzas, incomprensibles para los gringos, y los aborígenes les rezaban a los dioses de la naturaleza.
De aquella imposición el Siglo XVI, XVII y XVIII, nacieron costumbres mixtas. Los aborígenes celebraban a la Virgen mientras agradecían al Sol.
Un día, la penetración cultural de los dominantes fue tal, que las mantas dejaron de ser distintas pero con un fin igual, abrigar, y pasaron a ser una superposición de parches.
El parche mayor nacía arriba, era de fibra sintética, y cubría casi toda la manta. A los costados colaboraba un parchecito de alpaca, y por allá, uno de hilo.
Los parches más chicos querían formar parte del más grande, que estaba dispuesto a reemplazarlos en el próximo invierno.
Un día que todavía no fue, la frazada será una sola. Pero cuando alguien mire de cerca, podrá ver que hay costuras desprolijas de aquí y allá, son las grietas del sistema, la globalización lo abarca todo, pero cuando hay imposición, aunque pasen miles de años, en algún momento, la tela cede.

Se fue y esta vez no es tristeza, no es angustia ni nudo ni mal humor, es deseo de escribir algo, vaya a saber qué, y de poner música, Las Pelotas, Capitán América, Serú Girán, Seminare, Luis Salinas... Se fue y es la certeza de que nunca amé a alguien con tanta profundidad y al mismo tiempo con tanta alegría, a pesar de todo, que no es nada, absolutamente nada es estar allá y acá y todo lo demás, hoy no reperesenta ni un gramo de pimienta, ni una rodaja de pan viejo, ni un cuadradito de orégano. Mañana pueden pasar millones de estrellas contrariadas por mi luna y arruinarlo todo, otra luz por su película y quemarla de tanto amor, velarla, pero qué felicidad, qué linda locura es saber que yo puedo amar a alguien. Mañana es otro día, pero hoy, que tremenda sonrisa me brota de la cara por sentir amor y pensar que nadie sería capaz de modificar un sentimiento tan auténtico, tan fugaz, tan cambiante, pero tan mío. Fue cristalino.

Flores Rotas. Bill Murray. Me encantó.

No voy a decir que es la mejor película que vi en mi vida, ni la más divertida. Tampoco el mejor guión o la mejor fotografía. Que se yo, me gustó, punto, la miré con una semi-sonrisa en la cara, como uno mira cosas simples y bellas.

A mi hermano también le gustó. Entonces me pregunto por qué cuando termina mis viejos opinan que es muy lenta y aburrida y que de ahora en más no deberían hacerme caso. Por qué mi papá elige hablar gran parte de la película para sobrellevarla con buen ánimo.

Ya pasó algo parecido con las Invasiones Bárbaras, cuando se la recomendé a Gonzalo.

O con Requiem...que a Clau no le pareció gran cosa.

En fin, he concluido que no sirvo para recomendar películas. Pero Flores Rotas vale la pena.

Llámate Isabel, y serás Reina

(los siguientes son párrafos extraídos de Clarín.com http://www.clarin.com/diario/2007/05/03/conexiones/t-01411011.htm

que a su vez los extrajo de The Observer)

Una investigación reciente en los Estados Unidos, reveló que las chicas que reciben nombres "muy femeninos", como Anna, Emma o Elizabeth, tienen menos probabilidades de estudiar matemáticas o física pasados los 16 años. Ambas materias, que tradicionalmente son consideradas predominantemente masculinas, son más populares entre las chicas con nombres como Abigail, Lauren o Ashley, que fueron considerados menos femeninos en una prueba lingüística.

Al parecer la sentencia es tan determinante que los padres podrían lograr que dos hermanas gemelas elijan carreras completamente diferentes, con sólo bautizarlas Isabella y Alex, nombres que están en los extremos opuestos del espectro. Un estudio de mil pares de hermanas en EE.UU. determinó que Alex tiene el doble de probabilidades que su hermana de elegir matemáticas o ciencia en un nivel superior.

"Hay muchas explicaciones pero, en general, la gente trata a las Isabella de manera diferente que a las Alex", comentó el autor del informe, David Figlio.

También demostró que ponerle a un chico un nombre de nivel social más bajo puede cambiar su vida. En un estudio donde se trató con 55 mil chicos, las notas de los exámenes correspondientes a los nombres de menor nivel fueron, entre 3% y 5% promedio, debajo de los hermanos con nombres tradicionales. Los profesores tenían menos expectativas de las personas que estos nombres.